Les  contamos en la entrada anterior https://lanocheenvino.com/2017/11/25/brindis-con-la-luna-by-la-noche-en-vino/ que tuvimos la suerte de ser los primeros en degustar 2 joyitas de Solandes Wines, una el merlot vinificado blanco del cuál ya nos expresamos en https://lanocheenvino.com/2017/11/28/merlot-blanc/ y la segunda un magnífico carmenare argentino, para ser más específicos, Mendocino de San Rafael.

Distinto a un carmenere chileno, por si se les viene la comparación a la mente.

En su nueva línea de «microvinificados» Solandes Organic Wine se inspiró en la lectura de los códigos encriptados en los anillos de los troncos y cortezas para alcanzarla perfección en sus vinos.

Marcela Villalón Olivares, winemaker de la bodega, logró este Carmenere orgánico, argentino, de parcela única y producción limitada (solo 995 botellas) que evoca aromas y sabores ancestrales escondidos los secretos de la naturaleza.

En nariz es complejo, presenta notas espaciadas y de café amalgamadas con las notas cedidas por la madera de roble francés. Es un vino potente pero al mismo tiempo elegante que no satura el paladar sino que se desliza con suavidad en boca. Es untuoso y persistente.

Se presenta equilibrado con una muy buena evolución durante la estiba en botellas y podría soportar una guarda de por lo menos dos años más en condiciones controladas, es decir a temperatura e iluminación adecuadas.

Mi sugerencia de maridaje: con pastas con salsas rojas, carne vacuna asada y con un buen cordero.

Precio Sugerido: $900