Continuando con las experiencias que tuvimos la oportunidad de vivir en la vendimia del Valle de Colchagua lo cual hemos ido relatando en https://lanocheenvino.com/2017/04/15/chile-destino-enologico/ hoy es el turno de Viña MontGras.

Para ser sinceros fue Andrea Ilabaca, Gerente de Comunicaciones de MontGras quien nos invitara a conocer el Valle de Colchagua y la Viña a tan solo 2 horas 30 minutos de Santiago de Chile. Sin dudar ni un segundo fue que aceptamos la invitación que nos llevaría a descubrir el inmenso potencial que tiene la zona.

Si bien fue la invitación inicial, MontGras sería la ultima viña de la región que conoceríamos. Hasta ese momento lo que podía parecer una recorrida más fue rápidamente desterrado por Gonzalo Silva, del área de hospitalidad y turismo. No solo por la cordialidad y predisposición sino porque verdaderamente el tour por Viña MontGras fue diferente.

Ni bien llegamos nos llevaron a «terreno»: una viña experimental en cuál se encuentran todas las variedades de cepas que poseen  y en la cuál Gonzalo nos describiría expertamente las características de cada una. No solo una clase de ampelografía aplicada sino también la degustación de cada variedad con sus características organolépticas «in situ», al lado de la planta. Y creánme es la mejor experiencia que he vivido en materia viñas.

Así Gonzalo nos haría un curso intensivo de cepas, degustadas al pie de la planta y hablándonos de sus hojas, sus granos, su color, la piel,  la acidez, el sabor, la astringencia, las pirazinas, las semillas, y demás.

Pasaríamos por un Cabernet Sauvignon con su hoja característica en forma de «cara» con los ojos y la boca, el Merlot con su hoja completa sin orificios, Cabernet Franc con su sabor pirazínico, Sangiovese, Petit Verdot, Chardonnay, Sauvignon Blanc, Semillón, Pinot Noir, Garnacha, Tempranillo: el del racimo «enorme», Carmenere y Syrah.

Todo esto llevaría casi 2 horas, pero sin duda valió la pena.

Extasiados con la experiencia vendría luego la visita a la sala de elaboración del vino, en la cuál la «perlita» sería probar el vino directo del tanque de fermentación, algo así como beber la leche al pie de la vaca.

Nos contaría Gonzalo que dentro de las experiencias diferentes, MontGras fue la primera viña en realizar la actividad «Haz tu propio vino» que consiste en realizar un blending entre 3 cepas, en la proporción deseada, para luego embotellar y etiquetar tu propia botella. En la actualidad ya son varias las viñas que llevan acabo esta actividad pero se les reconoce a MontGras ser los pioneros. Además cuentan con variadas actividades como degustaciones a ciegas, cabalgatas, trekking, picnics y mucho más.

Y finalmente llegaríamos al momento de la degustación de sus vinos.

Comenzando por un fresco Chardonnay 2015 de la línea Amaral del Valle de Leyda, otro de los viñedos que MontGras posee en especial para sus vinos blancos. Excelente en nariz y con un color dorado único, en boca de una untuosidad que lo hace delicioso y persistente en paladar.

Continuaríamos con un exquisito Blend de la línea Quatro 2015. 50% Cabernet Sauvignon del Valle del Maipo,  20% de Carmenere, 20% de Syrah y 10% de Malbec del Valle de Colchagua. Un muy buen ejemplar de la línea entry level de excelente costo- calidad. Medalla de plata otorgada por Mundus Vini, a este blend intensamente aromático, de taninos sedosos y elegantes.

Luego vendría un Carmenere 100% 2015  de la línea Antu que significa Sol en lengua Mapuche. De la zona de Rapel, una excelente creación del enólogo Jefe: Santiago Margozzini. Un vino con aroma a frutas negras, de intenso color rubí, y con un dejo de pimienta en paladar y con buena estructura.

Y para el final Gonzalo nos tendría reservado un Ninquén 2011 60% Syrah y 40% de Cabernet Sauvignon  del Valle de Colchagua que como lo define Gonzalo es un vino «hecho a mano». Las uvas de este vino pasan por una rigurosa «triple» selección: en el viñedo, en la mesa de selección de uvas y luego de un estacionamiento del vino en barricas de roble durante 24 meses, se realiza la tercera selección utilizando las mejores barricas. Luego será embotellado sin filtrar para mantener la intensidad de la fruta. Esto da como resultado un vino de gran estructura, acidez justa y persistente en paladar. Ninquén 2011 recibió el reconocimiento de James Suckling con 93 ptos y 93 ptos Descorchados.

MontGras posee viñedos en Valle del Maipo, Valle de Leyda y en el Valle de Colchagua, lo que da una diversidad de terroirs a sus vinos muy destacada. Cuenta con 5 enólogos elaborando sus vinos de los cuáles muchos de ellos han sido premiados en sucesivas oportunidades. Pero además de eso se destaca la cordialidad de su equipo de trabajo, las ganas de transmitir lo que la Viña produce y la excelente preparación de su gente para transmitir los conocimientos.

Una visita imperdible!