No se desesperen, no los voy a invitar a cenar y servir leche para beber. Tranquilos. Todo tiene su explicación. Sigan un poco más y se enteran.
Si hay algún audaz que quiera incursionar en el idioma alemán, encontrará que muchas veces una palabra conforma una oración, por ejemplo, hay un sustantivo (o más) y el correspondiente adjetivo calificativo. Por ejemplo: «milschokolade» significa «chocolate con leche». La propia estructura del idioma, necesita que el calificativo esté pegado al sustantivo para evitar confusiones.
Si analizamos de la misma manera al «Liebfraumilch«, llegaremos a traducir «leche de la mujer amada»; pero en realidad estamos hablando de un vino semi-dulce que se produce en las regiones de Rheinhessen, Palatinado, Rheingau y Nahe en Alemania.
Su historia más renombrada nos lleva a fines del siglo XVIII, y cuenta que el vino en cuestión se producía en las viñas de Liebfrauenkirche o Iglesia de Nuestra Señora, en la ciudad Worms del estado Renania-Palatinado Este en principio era de buena calidad y baja producción pero con la llegada del holandés Peter Josef Valckenberg y su negocio de exportación, se transformó en un vino genérico de bajo precio.
El envase, la etiqueta, la presentación en sí y la ficha técnica del más nombrado de los Liebfraumilch de P J Valckenberg, el Madonna Liebfraumilch, hablan de un vino blend con 9 % de alcohol, 6,6 g/l de acidez y 41,3 gr/l de azúcar residual.
Para completar la ficha hablamos de un vino con notas florales y frutal, sedoso. El maridaje recomendado por el productor puede ser carne, ensaladas, postres no muy dulces; pescados de sabores fuertes y comida asiática. También como aperitivo.
Menos prometedor que nuestro conocido Gewürztraminer, si se dan una vuelta por Alemania, nos cuentan cómo les fue.
PD: «SubanEmpujenEstrujenBajen» no significa «omnibus» en alemán.
Agregar comentario