Siempre es agradable reencontrarse con amigos, y esto es lo que hicimos el pasado jueves 29 de septiembre, en un lugar que nos es demasiado familiar: la Escuela Argentina de Sommeliers.

Todos los años para esta fecha, se realiza el Wine Open Day, momento que sirve como excusa para el reencuentro, pero también para descubrir vinos que no conocíamos o que no habíamos probado.

Marina Beltrame, siempre presente como excelente anfitriona que es, encabeza el equipo de profesionales y alumnos que nos hacen pasar un rato de verdad placentero, y además solidario dado que parte de la entrada es en alimentos no perecederos que esta vez fueron a la fundación Necesidad + Urgente.

Dentro de la Escuela, el recorrido comienza por los blancos y espumosos, donde encontramos vinos de primer nivel, de la talla de Boher, María o el Malamado Viognier.

Como es lógico, seguimos por los rosados y cepas tintas más “fáciles”, finalizando en los tintos exquisitos como Intimo, Pulenta Estate, Quorum III, por solo nombrar a algunos.

El encuentro también sirve para ponernos al día en la marcha de nuestras cosas, personales y profesionales; y los intercambios con Alex Rodriguez no tienen desperdicio. Desde qué vinos recomendarle a alguien muy habituado a los vinos del NOA; hasta el crecimiento de la actividad en en el Interior y en la Capital; pero esto será motivo de otra charla en otro lugar de encuentro.

No puedo ser imparcial, la EAS es el lugar donde hice “mis primeros palotes” en el vino, y mi lugar de referencia cuando busco más; así que solo puedo recomendarla por la gente, el entorno y el profesionalismo.

Será pues, hasta la próxima vez.