Para que se pongan contentos mis amigos «vinotecarios», voy a decir que así como los remedios se compran en la farmacia, y los diarios en el quiosco; los vinos NO los compro en el supermercado  (las otras cosas, tampoco).

Quise comprarle un rosado a mi suegra – sí caballeros, la suegra tambien existe y en algun momento les puede regalar un DV…- y encuentro en el super, el vino justo. Emilia 375 ml. Rosé. Quedaban soo dos botellas y dije… me llevo ambas. Ahora, miren la imagen. La diferencia de color es notoria. La añada también. En 2015 (fines) estan vendiendo dos vinos que eran para ser bebidos no mas alla de 2012/2013. El precio: $ 48 cada botella. Si las hubiera llevado, Emiiia y yo quedábamos muy mal con mi suegra y seguiríamos comiendo pan duro.

En las gondolas encontré DV Catena Zapata malbec malbec 2011 y otros muy buenos vinos. En medio de ellos un Val de Flores 2006 a $ 485.- tengo miedo de comentárselo a Michel Rolland… No quiero pensar de donde vienen o en que condiciones han sido guardados.

Personalmente, no creo que vinos de una determinada calidad sean «bien tratados» en los supermercados argentinos. Simplemente no creo que los empleadores capaciten correctamente a sus empleados, para alguien que no conoce de vinos, es lo mismo un gran reserva 2006 que el vino patero de mi abuelo.

Por mi parte, seguiré disfrutando mientras pueda, de las buenas charlas con mis amigos, en las que además siempre me dan a probar algo rico, y les llevo algo más rico aún.