La vitivinicultura no es una ciencia exacta. Al depender de elementos que se modifican con las variables de la naturaleza, cada cosecha es distinta de la anterior.
La cata vertical es una sesión en la que se comparan vinos de la misma etiqueta pero de distintas añadas, esto quiere decir, tu vino preferido en la cosecha de, por ejemplo, 2011; 2012 y 2013.
¿Y qué es lo que puede haber influído tanto en la naturaleza para que el vino sea diferente? Lo que más puede influír es sin dudas las lluvias (y granizos) y las variaciones de temperatura (altos calores y fríos intensos). Estas adversidades climáticas dañan a la uva ya sea rompiéndola o alterando el proceso de maduración dando como resultado alguna nota amarga o no esperada en ese vino.
Por el contrario, puede ocurrir que la naturaleza desee que un año en particular, se den todas las condiciones óptimas para esa cepa en ese lugar y el fruto del esfuerzo se vea recompensado con un vino extraordinario. Si esto ocurre, lo vamos a notar rápidamente en la etiqueta y en el precio 😉
Si hay una cata vertical, también existe una cata horizontal y esta consiste en probar vinos de distintas etiquetas pero de la misma D. O. C. y eso podrá ser motivo de otra entrada.
Agregar comentario